Posted On 19/11/2013 By Cebrita In Belmonte, 100 años de alternativa With 2476 Views

1920-1921

Cebrita Nov 19, 2013

Belmonte 100 años de alternativa

Relatos sobre las anécdotas que se recogen en el libro “Juan Belmonte, matador de toros” del autor Manuel Chaves Nogales.

En 1920 Belmonte toreo a diario y para la temporada en Septiembre, la razón principal, por el desgaste psicológico y la presión que se ejercía sobre su toreo al faltar Joselito y asumir en su persona todo el peso de las expectativas del público, cosa que antes complementaba con José.

Durante toda la temporada se rumoreó con la retirada de Belmonte, debido a su bajo nivel y cansancio, pero ese rumor estaba totalmente infundado y aquella idea nunca se le pasó por la cabeza al maestro. Belmonte mató aquel año 82 toros y acabó firmando contrato para México.

Corría ya 1921 y la temporada mexicana fue un auténtico desastre, la peor de toda la carrera de Belmonte y todo pudiera ser por su gran agotamiento tanto físico como mental.

Acaba la temporada mexicana y se trasladan a Perú en un barco americano donde la comida que le servían dejaba mucho que desear y no por la calidad de la comida dispensada sino por su preparación, que no acababa de convencer a los españoles. Estos tuvieron que buscarse la vida y cuando hacían tierra, entre lo que pescaban en los puertos de atraque y los alimentos que conseguían como huevos y el cargamento de jamones ibéricos que Calderón llevaba para su comercio, fueron pasando la travesía de una forma más acorde con las costumbres culinarias de la madre patria.

La temporada Limeña finalizó de una forma totalmente exitosa ya que en cada corrida se produjo un éxito rotundo, hay que tener en cuenta que torear en Lima era como torear en casa y Belmonte consideraba aquel país como el suyo propio, no olvidemos que era la tierra de su esposa y el trato hacia él era exquisito.

Al finalizar la temporada en Perú, Belmonte manda a toda su cuadrilla (Catalino, Camero, Magritas, Maera y Calderón) para España y el se va para E.E.U.U con su mujer a pasar unas merecidas vacaciones.

Bernabé Álvarez Fernández «Catalino»

Luís Suarez «Magritas»

Manuel García López (Maera)

José María Calderón

Tabacoso (cuya imagen infunde pavor) derriba a Camero. Belmonte (de azul claro y oro) al quite. José (de grana y oro) muy atento. De Camero destacaba Barbadillo uno de sus puyazos, “doblándose colosalmente sobre el palo y lastimando atrozmente a la res con la perfecta y asombrosa ejecución del arte de picar”. En general, la crítica puso por las nubes la actuación de Camero, el picador estrella de Joselito (Fotografía de Toros y toreros facilitada por Rafael Cabrera)

Cap.1.- Primera heroicidad

Cap.2.- Cazador de leones

Cap.3.- Ha nacido un torero

Cap.4.- Una verdad revelada

Cap.5.- El segundo de La Tablada

Cap.6.- El que para, manda

Cap.7.- Un “Tancredo”, veintitrés reales

Cap.8.- Juan “Er der Monte”

Cap.9.- Los panecillos de Elvas

Cap.10.- Rios de sopa y montañas de pescado

Cap.11.- El Cambiazo

Cap.12.- Aún hay justicia en la tierra