Belmonte 100 años de alternativa
Relatos sobre las anécdotas que se recogen en el libro “Juan Belmonte, matador de toros” del autor Manuel Chaves Nogales.
Belmonte se dirigía a Valencia y de vez en cuando sacaba el retrato de su amada y lo besaba con la misma determinación que llevaba para triunfar como torero.
Desde el desastre de Sevilla donde le devolvieron al novillo a corrales ya nadie confiaba en él, Belmonte había toreado desde entonces, solamente en Lorca pero actuando con el nombre del torerillo al que sustituía, un tal Picocho, el cual le debe el triunfo que aquel día Belmonte disfrutó pero bajo el nombre de Picocho.
Belmonte llega a Valencia dispuesto a aprovechar el último cartucho que le quedaba y a triunfar como torero, se presenta ante el Sr.D.Vicente Calvo que era el contacto que le había comentado Calderón, pero las cosas se ponian feas ya que D. Vicente, ante la convicción de que Belmonte llegaría tarde ya había contratado a Torerito de Valencia, aunque finalmente opta por llevar también a Castellón a Belmonte en calidad de sobresaliente.
En el primer toro es cogido Torerito de Valencia y Belmonte entra a torear con Vaquerito, aunque Juan intenta por todos los medios convencer a Vaquerito para que le deje matar un novillo y este le dice que si, el tiempo pasa y a Vaquerito no se le ven trazas de cumplir lo acordado; llegado el turno del último de la tarde Belmonte decide echarse a por el novillo adelantándose a Vaquerito, dándole unos capotazos y en los quites haciendo algunos muy ceñidos, logra que el público se levante de sus asientos estusiasmado con lo que estaban viendo.
Con aquella corrida Belmonte se queda con la etiqueta de temerario empezando así la eterna discusión entre los que lo vieron torear y lo tacharon de loco disparatado y los otros que afirman que lo que Belmonte hacía con el capote era de gran torero.
D. Vicente Calvo busca la manera de hacer torear a Belmonte en Valencia, así mientras,se queda a vivir en la pensión de Doña Julia , Belmonte no tiene dinero pero Doña Julia le cobra dejándole que le haga ciertos favorcillos y recadillos hasta que fuese un gran torero y le pagase todo lo que en realidad le debía.
Y esperando el gran día este llegó aunque no sería de la forma más sencilla, resulta que en la plaza quedaban unos novillos sobreros de los que dos de ellos se encargaría Belmonte, los novillos eran esperpénticos, feos y con unos cuernos de dificiles denominación; Belmonte debía buscar traje cosa dificil con la fama de temerario que tenía.
El último día Belmonte seguía sin tener traje y por la mañana se dirigió a los corrales de la plaza para ver por última vez a sus monstruosos enemigos, ya allí se le acercó un viejo banderillero que le preguntó como se encontraba de ánimos a lo que Belmonte le respondió contándole todas sus inquietudes incluidas su falta de traje, cuadrilla, dinero para la fonda, a tan solo unas horas del festejo y que lo único que tenía eran unos Novillos feos, entonces el viejo bandeillero le aconsejó que fuera a la estación de tren y cogiera el primer tren para Sevilla.
Finalmente encontró un traje en un guardaropa de un teatro, si a aquello se le podía llamar traje de luces, la tela era horrible y los bordados imposibles pero era lo único que tenía, Belmonte se pasó toda la noche areglando lo que se podía de aquel horripilante traje de luces.
Por la mañana y sentado en el borde de la cama veía enfrente apoyado en la silla, el traje esperpéntico, pensó que los toros metían miedo y así se echó a releer las cartas de su amada y las quemó una a una, hizo examen de conciencia y se despidió mentalmente de su familia y muy a su peasr tomo una terrible determinación, aquella tarde moriría en Valencia.
Cap.1.- Primera heroicidad
Cap.2.- Cazador de leones
Cap.3.- Ha nacido un torero
Cap.4.- Una verdad revelada
Cap.5.- El segundo de La Tablada
Cap.6.- El que para, manda
Cap.7.- Un “Tancredo”, veintitrés reales
Cap.8.- Juan “Er der Monte”
Cap.9.- Los panecillos de Elvas
Cap.10.- Rios de sopa y montañas de pescado
Cap.11.- El Cambiazo
Cap.12.- Aún hay justicia en la tierra
Cap.13.- Llegó el amor y Sevilla
Cap.14.- ¡Mátame,asesino,mátame!
Cap.15.- A Valencia con amor
NUESTRAS REDES SOCIALES
Followers
Likes